Uno de los principales atractivos de adaptar tu vehículo a GNV es el ahorro en combustible. El precio del gas natural vehicular, suele ser considerablemente menor que el de la gasolina, el cual te permitirá ahorrar hasta un 35% en combustible. Adicionalmente al ahorro, quedarás exento de pico y placa, y podrás rodar todos los días sin restricciones.
Adaptar un vehículo a GNV es un proceso técnico que requiere profesionales certificados. En primer lugar, se evalúa el tipo de motor y se determina el sistema más adecuado para la adaptación. Ten presente que no todos los vehículos requieren el mismo tipo de instalación, por lo que un diagnóstico previo es esencial.
Luego, se instala el kit de GNV, el cual incluye entre sus componentes el cilindro de almacenamiento, Pico de llenado, riel de inyectores, regulador de presión y Computadora a GNV. Todo esto se hace siguiendo estrictos protocolos de seguridad para garantizar un funcionamiento confiable.
Una vez instalado los componentes, el vehículo pasa por pruebas de rendimiento y calibración, esto con el fin de asegurar que el motor funcione correctamente, tanto a gasolina como a GNV, manteniendo la eficiencia y la potencia original del vehículo.
Por último, se realiza la entrega del vehículo con su certificación de adaptación, lista para operar en la red de estaciones de GNV. Con este proceso, conducir se vuelve más económico, seguro y amigable con el medio ambiente.
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